Juan José Fernández Domínguez.
Francisco Xabiere Gómez García.
Catedrático y Ayudante de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social.
Universidad de León.
Cuanto hace poco más de tres décadas aparecía en el panorama jurídico como un experimento de dudoso futuro, constituye hoy en día una floreciente realidad; al punto de poder considerar a los Acuerdos Marco Globales (AMG) una de las muestras más avanzadas de responsabilidad social corporativa, tanto por el rasgo distintivo de su origen negociado, como por la incorporación de contenido de la máxima actualidad.
Así ocurre con la preocupación que muestran por los avances tecnológicos, no solo (aunque también) en el sentido más tradicional de afrontar los procesos de reestructuración y reconversión derivados de su incorporación a la actividad productiva, sino en el más incisivo de servir de referencia para una gestión anticipada del cambio empresarial y social con proyección sobre la organización del trabajo.
A estos acuerdos, casi siempre monográficos y ceñidos al espacio europeo (para así permitir vislumbrar el diálogo a doble nivel que acompaña muchas veces a las multinacionales), cabe unir, con proyección universal, otros cuatro aspectos destacados, cuyas líneas maestras podrían quedar compendiadas en el siguiente balance:
1.La importancia de la tecnología en la gestión, implementación y seguimiento de la negociación colectiva transnacional
Un primer dato harto significativo para cualquier reflexión ulterior viene dado por el ámbito funcional de los AMG, en tanto cabrá constatar cómo las entidades complejas intensivas en capital y tecnología son, con diferencia, las que acuden mayoritariamente a este instrumento de regulación de las relaciones laborales; además, las más dispuestas a extender sus previsiones a la cadena de valor.
Factor, el anterior, capaz de incidir en la selección del interlocutor social, no en vano a la presencia de la Federación Sindical Internacional (FSI) del ramo como sujeto encargado de estructurar la interlocución a distintos niveles y con la rapidez exigida en la sociedad actual, procederá unir en numerosas ocasiones la presencia de los comités de empresa, justificada porel dato de ser su impulsor a través de un acuerdo regional previo y, en particular, por la información de que disponen, su capacidad de coordinación y los recursos que están en disposición de aportar, básicos a la hora de mantener un contacto fluido con el sindicalismo de origen estatal.
En la dinámica de la negociación, presidida por “protocolos”, “guías” o “recomendaciones” que buscan una cierta uniformidad en el método y resultado, sus distintas fases se beneficiarán notablemente de los avances de la ciencia y de la técnica, como reflejan claramente las actas de las reuniones y textos finales de los referentes aquí sopesados. De este modo:
A) En la negociación, la recopilación de información o su transmisión en tiempo y forma, la posibilidad de consensuar posiciones con anterioridad a sentarse a la mesa o la formación de redes sindicales y sociales, así como las estrategias de comunicación interna o influencia externa durante el desarrollo de las conversaciones, demandan medios de última generación. A tal fin, y como expresión de buena fe contractual, en numerosas ocasiones cabrá constatar el compromiso de su puesta a disposición por parte de la multinacional, o la dotación oportuna desde la FSI hacia los niveles inferiores.
B) En orden a su implementación, la “digitalización de la transparencia”, más allá de la frecuente asunción empresarial de la obligación de difundir el contenido de lo acordado en su página web (y la correlativa de la FSI de hacer lo propio), presenta el importante elemento de interés derivado de la transmisión del compromiso a terceros, ya sea a través de la fórmula común o más habitual dada por el deber de la multinacional de influir sobre su cadena de valor, ya de incluir las obligaciones contraídas en los contratos firmados con terceros, ora a partir de la adopción formal de la decisión de rescindir los contratos a proveedores o suministradores si no se atuvieran a la política asumida por el principal, lo cual conlleva la dotación de los elementos personales y materiales oportunos para efectuar una vigilancia de la labor desarrollada por quienes pueden comprometer su prestigio.
C) Por último, para un eficiente seguimiento y control del cumplimiento del AMG también resultarán fundamentales las previsiones relativas a la transmisión transparente y regular de información y la provisión de las vías de coordinación adecuadas. En este último extremo, la figura de las comisiones de seguimiento viene a resultar una solución generalizada, acompañada casi siempre de cláusulas concretas relativas a la realización de reuniones por videoconferencia, con seguimiento a través de cuestionarios y encuestas que por vía informática consiguen alcanzar hasta el lugar más recóndito, comunicaciones fluidas y presenciales con los representantes de las personas trabajadoras en los lugares de ejecución de la prestación o creación de líneas éticas a través de las cuales cabe formular las reclamaciones y quejas destinadas a abrir los sistemas de solución de conflictos, en cuyo seno no faltan indicaciones acerca de las fases de instrucción a distancia y facilidades para lacomparecencia on line.
2.Del enriquecimiento de los derechos fundamentales al germen de los derechos digitales
El anuncio de que la formación en derechos humanos se incorpora a los cursos ofrecidos por BNP Paribas de e-learning no es sino la punta del iceberg de un cúmulo de proyectos que los avances de todo tipo permiten recoger en los AMG para la mejora de la sociedad y de colectivos concretos dentro de la misma.
Cobran así sentido las iniciativas surgidas de estos instrumentos que tienen por finalidad construir infraestructuras educativas y sanitarias con soporte informático en los entornos donde se asientan (ofertas e-learning y e-health); así como otras destinadas a colectivos específicos, según ocurre con las personas con discapacidad (por ejemplo, aplicaciones digitales accesibles para personas con déficit visual o auditivo) o, en particular, las mujeres, ordenadas a cubrir un doble déficit que destaca sobremanera: de un lado, las múltiples brechas tanto en el aspecto económico como social; de otro, la particular preocupación por una formación apropiada, con programas adecuados a sus necesidades y circunstancias y una específica atención al desarrollo de competencias vinculadas a cuanto cubre el amplio espectro de la referencia a STEM, pudiendo servir de modelo la acción que en este sentido contempla, por ejemplo, el acuerdo de GDF Suez Engie.
Al lado de este aspecto tan trascendente, no cabrá desconocer el aspecto instrumental que ofrece la incorporación de medios electrónicos al desarrollo de otros derechos de la población trabajadora, o a la aparición de derechos de nuevo cuño, pudiendo destacar el diseño de alertas anónimas (o no) sobre conflictos de intereses, la publicación en internet de las ofertas de empleo o de vacantes existentes en el grupo a nivel mundial, el diseño de plataformas para intercambio de conocimientos, la garantía del respeto a la vida personal precisamente a partir del control efectuado mediante medios electrónicos, la utilización de las nuevas formas de trabajo digital al servicio de la conciliación de la vida profesional y personal, con específica garantía derivada del derecho de desconexión, o, en fin y al calor de la pandemia provocada por la COVID-19, la elaboración de sofisticadísimos acuerdos específicos sobre teletrabajo como el que ofrece el Grupo Renault.
3.La formación en tecnología y a través de la tecnología
Tomando como punto de partidaque las competencias y conocimientos técnicos del personal son útiles para el futuro del grupo empresarial, en tanto aval de un rendimiento superior en cantidad y calidad, tampoco ocultan los acuerdos analizados el interés que asiste a las personas trabajadoras como garantía del mantenimiento del empleo y de la promoción profesional.
En este sentido, abundan las herramientas digitales destinadas al aprendizaje electrónico, e incluso los lugares como el ofrecido por Safran a los jóvenes, conscientes de la necesidad de desarrollar este derecho (pero también deber de las personas empleadas) en todas sus dimensiones y etapas de la vida laboral, con atención particular a colectivos que poseen necesidades específicas en relación con la tecnología, según ha quedado expuesto respecto de las mujeres o, conforme aparece en distintos documentos, las personas de edad avanzada en los procesos de ineludible reciclaje.
4.Innovación en relación con la política medioambiental y de salud laboral
La aparición de riesgos emergentes derivados de los nuevos útiles y métodos de producción, así como la posibilidad y/o necesidad de aprovechar los avances científicos y técnicos para aumentar el bienestar social y laboral, son dos elementos que siempre han vinculado, dentro del contenido de los AMG (al igual que ha venido ocurriendo durante mucho tiempo con los planteamientos de la OIT), la seguridad y salud laboral y la preocupación medioambiental.
Esta última, empero, va ganando progresivamenteespacio propio a partir de la incorporación de estándares medioambientales por remisión (Declaración de Río, Principio número 9 del Pacto Mundial de la ONU, Acuerdo sobre cambio climático de París, los índices a ponderar de lasGlobal Reporting Initiatives o la exigencia de certificación a través de las normas ISO 14001 y 45001), así como de la previsión de cláusulas específicas destinadas a concienciar a las personas trabajadoras (como “población diana”) de los problemas medioambientales y, sobre todo, de medidas ordenadas a asegurar la mayor eficiencia energética no únicamente en la actividad productiva de la multinacional, sino en la extensión a toda su cadena de valor, como bien resumen, por ejemplo, los quince principios de la Carta de Desarrollo Sostenible del Grupo Valeo.
Una plantilla comprometida con una transición justa que viene a ser, también, el reclamo principal en el ámbito de la seguridad y salud laborales, donde, amén de domeñar los peligros de las nuevas tecnologías, su empleo aparece al servicio de actividades que tienen que ver con la información y formación en la materia, la incorporación de novedades a los reconocimientos médicos, el eficaz manejo de los riesgos psicosociales que puede generar la tecnología y un etcétera abierto a la planificación y la sensibilización como vía activa para abandonarel “papel” o la “vitrina social” y acoger las mejores experiencias o prácticas más avanzadas en la protección de las personas trabajadoras.
Hasta aquí el resumen para el lector de una monografía donde los autores han querido ser fieles receptores de cientos de iniciativas sistematizadas bajo un norte claro: la tecnología al servicio de la sociedad.